Se define como Incontinencia Anal a la pérdida involuntaria a heces líquidas, sólidas y gases. Se puede dividir según su mecanismo en:
- Incontinencia pasiva: caracterizada por la pérdida de evacuaciones sin tener el aviso o la sensación de defecar.
- Incontinencia de urgencia: caracterizada por presentar un deseo por defecar pero la incotinencia ocurre a pesar de los esfuerzos por retener las evacuaciones.
La Incontinencia Anal tiene un efecto social y económico negativo de alto impacto en la calidad de vida de las pacientes.
La prevalencia de incontinencia anal esta subestimada ya que muchos pacientes no buscan ayuda o no lo reportan a su médico por pena o vergüenza, presentándose desde el 1 al 24% de la población, siendo más común en mujeres de edad avanzada y en aquellas que han tenido uno o más partos. El tratamiento puede ser conservador, tratamiento médico o quirúrgico dependiendo el tipo de incontinencia y la severidad de la misma.
Padecer Incontinencia Anal puede ser penoso y estresante. Las mujeres que padecen esta patología prefieren quedarse en casa por miedo a sufrir un “accidente” si usted presenta problemas para controlar sus evacuaciones debe de saber que este problema NO es parte del envejecimiento y a menudo puede ser tratado y solucionado.

